Ingredientes
- 4 pechugas de pollo
- 1 cebolla
- 50g de raíz de jengibre
- 400g de carne de membrillo
- 200ml de vino dulce
- 500ml de caldo de pollo
- 1 cucharadita de nuez moscada
- 2 clavos molidos
- Sal y pimienta
- Aceite de oliva
Preparación
- En una cazuela amplia, ponemos un chorrito de aceite y lo calentamos a fuego fuerte. Cuando esté caliente, añadimos las pechugas previamente salpimentadas.
- Dejamos que se cocinen alrededor de unos 5 minutos por cada una de sus caras. Cuando estén doradas, retiramos las pechugas del fuego y las reservamos en un plato.
- En la misma cazuela, vamos a cocinar la salsa de membrillo que acompañará a nuestras pechugas de pollo. Para ello, bajamos la potencia a fuego medio y agregamos la cebolla y el jengibre bien picados. Salpimentamos y dejamos que se cocine todos unos 10 minutos, removiendo de vez en cuando.
- Pasado este tiempo, añadimos el membrillo cortado en dados. Mezclamos hasta que se deshaga por completo. Después, agregamos el vino dulce, la nuez moscada y el clavo. Removemos nuevamente para que se mezclen todos los ingredientes y dejamos que el alcohol evapore durante unos 2 minutos.
- A continuación, devolvemos las pechugas a la cazuela y añadimos el caldo de pollo, que las pechugas queden bien cubiertas con este caldo. Dejamos que todo se cocine durante unos 40 minutos más. Si durante la cocción se evapora mucho líquido, añade un poco más de caldo. Finalmente, cuando las pechugas de pollo estén cocinadas, servimos.